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UC - Críticas

País: Francia.

Año: 2013.

Duración: 85 min.

Género: Comedia.

 

Dirección y guion: Guillaume Gallienne.

Producción: Cyril Colbeau-Justin, Jean-Baptiste Dupont, Alice Girard y Edouard Weil.

Música: Marie-Jeanne Serero.

Fotografía: Glynn Speeckaert.

Montaje: Valérie Deseine.

Vestuario: Olivier Bériot.

Distribuidora: A Contracorriente Films.

 

Estreno en España: 28 Marzo 2014.

Calificación por edades: No recomendada para menores de 7 años.

Interpretación: Guillaume Gallienne (Guillaume / mamá), Françoise Fabian (Babou), André Marcon (el padre), Diane Kruger (Ingeborg), Nanou Garcia (Paqui), Reda Kateb (Karim), Götz Otto (Raymund), Charlie Anson (Jeremy).

 

LA SEXUALIDAD SOCIAL

“Guillaume y los Chicos, ¡a la Mesa!" es una curiosa e insólita comedia francesa que ha cosechado un éxito increíble de crítica y público en el país vecino, encunbrándola con 5 Premios César (incluyendo mejor película) y nada menos que 10 nominaciones. Un poquito exagerado todo, pese al interés del planteamiento, la película encadena aciertos y defectos por igual, pero bueno, aquí también somos expertos en crear fenómenos paranormales en lo que hace referencia a éxitos inesperados del cine patrio.




SINOPSIS: El primer recuerdo que tengo de mi madre es de cuando tenía cuatro o cinco años: nos llamaba a mis dos hermanos y a mí a la mesa diciendo: «Niños, Guillaume, ¡a cenar!» y la última vez que hablé con ella por teléfono, colgó diciendo: «Cuídate, mi niña grande.» Y, bueno, entre estos dos momentos hubo un buen número de malentendidos.



“Guillaume y los Chicos, ¡a la Mesa!" plantea un relato autobiográfico del propio guionista y director Guillaume Gallienne que utiliza la comedia para exorcizar los demonios de una realidad mucho más dura y amarga, casi a modo de terapia, que nos habla de la volatilidad de nuestra identidad sexual en el tramo de la adolescencia. De ese modo, el joven protagonista con un complejo edípico galopante no deja de imitar a su madre hasta el punto de perder su propia personalidad, asumiendo como propia una homesexualidad artificial que todos a su alrededor le asignan como real. Es curioso comprobar que Guillaume interpreta en la película el papel del joven protagonista, pero también el de su madre, lo que hace dudar de si ciertamente ha superado ese complejo de Edipo.


 

“Guillaume y los Chicos, ¡a la Mesa!" es una comedia atípica y desconcertante, se agradece esa búsqueda de un lenguaje propio partiendo de una concepción teatral, aunque a veces ese extraño tono lo único que consigue es acrecentar la distancia con el espectador. La película es una dramedia emocional que mejora a medida que pasan los minutos y la amargura del conflicto empapa el relato, pero que para aligerar tensiones recurre también a la comedia ligera o de humor grueso en sus peores momentos (las escenas en España, la del reconocimiento médico con Diane Kruger...). Guillaume, en su Ópera Prima, muestra destellos de autor con voz propia y hace un uso inteligente de la música, como en la estupenda secuencia de la piscina al son de las notas del "Don't Leave Me Now" de Supertramp.




UC (Daniel Farriol).

TRAILER